Esta costanera a orillas del río Luján es un recorrido decorado con faroles, una importante cantidad de árboles, bulevares y zonas de descanso. La imponente vista del río Luján se combina con pintorescos bares y restaurantes. Este paseo nace en la calle Lavalle y termina en la desembocadura del río Reconquista.
Este monumento inaugurado a principios de la década del 90 posee la figura central de un remero rodeada con mástiles que portan las banderas de los clubes de remo de Tigre. Demuestra la importancia que tiene este deporte para Tigre, donde hacia finales del SXIX se corrió la 1º Regata Internacional sobre las aguas del Río Luján (sobre cuya costa se emplaza este monumento). Esta regata impulsó el establecimiento de sedes de clubes de remo que, en aquel entonces, se encontraban en la zona del Riachuelo. Hoy Tigre, "Cuna del remo argentino", posee alrededor de quince clubes dedicados a la práctica de este deporte.
El Museo y Centro Naval fundado el 20 de mayo de 1892 se encuentra destinado a exhibir la historia, la tradición y la cultura naval y marítima de la Nación. Sus salas albergan armas, instrumentos de navegación y modelos a escala de las embarcaciones pertenecientes a la Marina. En un amplio terreno contiguo están expuestas numerosas piezas de artillería y aviones que integraron las escuadrillas de combate de Aviación Naval. El edificio fue construido inicialmente para instalar los primeros talleres de la Armada.
El Museo de Arte Tigre nace sobre la base de una idea y proyecto del señor Intendente Contador Ricardo Ubieto. Se emplaza en lo que otrora fue el Tigre Club, un clásico edificio de la Belle Epoque. Su colección, patrimonio de la Municipalidad del partido de Tigre, cuenta con obras de arte figurativo de finales del siglo XIX y del siglo XX. Posee grandes pórticos, armoniosas arcadas y una columnata que llega hasta el río. Organizado temáticamente, las siete salas del MAT proponen al visitante un recorrido por los aspectos más destacados de la historia del arte nacional: el paisaje y la arquitectura, la figuración humana, la naturaleza muerta, el puerto, la génesis de nuestra plástica y Tigre como referente estético.
Santiago Calzadilla y su esposa Elvira Lavalleja construyeron su casa en 1856 para usar como residencia de verano, con lujos desmedidos para esa época: anchas paredes, chimenea en el comedor, bronces muy trabajados, cerámicas y pisos de parquet importados; en la galería baldosas rojas, azules y blancas en alegre juego. Calzadilla fue militar, escritor, el primer crítico musical del periodismo bonaerense y pianista. En 1891 publicó el libro "Las Beldades de mi tiempo". Es un libro de costumbres que describe al Buenos Aires de esa época y rumores en el Pueblo de las Conchas. Prilidiano Pueyrredón pintó en esta casa en 1859 a Calzadilla y su esposa. Los cuadros al óleo se encuentran hoy en el Museo Nacional de Bellas Artes.
Construida en la mitad del siglo XIX por la Flía. Oliveira César, que la habitó durante varios años. Fue adquirida más tarde por Delfina Huergo de Astengo. Testimonio de la época que va de 1856 a 1886, fue lugar de reunión de ilustres personajes como el Gral. Bartolomé Mitre. La casa, de bella y sencilla construcción, es de una sola planta , edificada sobre nivel, siendo necesarias breves escaleras que trepan al jardín y a la casa. Posee un portón de entrada de hierro forjado con las iniciales en letras mayúsculas de Delfina Astengo entrelazadas a modo de monograma. Su fachada presenta un hall central con dos columnas neoclásicas y pilastras a sus costados.
Este Museo inaugurado en 1985 cuenta con seis salas: historia institucional, iconografía, control de averías e incendios, comunicaciones, salvamento y buceo, uniformes, navegación y aviación, armas y explosivos.
Construida por don Agustín Martínez, guerrero de la independencia. La casa posee arquería de medio punto apeadas sobre columnas toscanas, y contaba con un embarcadero. Eduardo Zimerman la adquirió en 1890, teniendo su residencia en la Capital. Trabajó con los primeros molinos harineros del país, situados en Cañuelas y en Olavarría. La familia Beláustegui es la actual propietaria del inmueble.
En el predio que ocupa en la actualidad se estableció en 1770 la primera capilla de la Comarca. La construcción que hoy observamos data de 1945 y corresponde al estilo neoclásico.
Se encuentra frente al sitio histórico, a orillas del río Reconquista, donde el 4 de agosto de 1806 desembarcó Santiago de Liniers y un grupo de hombres, procedentes de Colonia del Sacramento (República Oriental del Uruguay) era su propósito reconquistar Buenos Aires en poder de invasores británicos. Se concreta la Reconquista el 12 de agosto de 1806. El Museo funciona en la reconstruida casa de la familia Goyechea, cuenta con salas dedicadas a la Reconquista y Defensa de Buenos Aires. Otras salas están dedicadas a la historia del Partido de Tigre y la primera iglesia, además de una dedicada a la historia del Tigre Hotel y Tigre Club.
La estación Terminal Delta del Tren de la Costa es un complejo donde se combinan la vieja estación reciclada y las 15 hectáreas del Parque de la Costa. Inaugurado en 1997, este centro de diversiones cuenta con gran cantidad y variedad de atracciones mecánicas, fuentes de aguas danzantes, shows, restaurantes, paseos en catamarán.
Ubicado al lado del Parque de la Costa, este centro de entretenimientos cuenta con más de 1500 máquinas tragamonedas. Su entrada es libre y funciona todos los días del año. Los fines de semana hay espectáculos y músicos en vivo.
Los grandes galpones del muelle forman este antiguo puerto, hoy reciclado a orillas del río Luján. Originalmente en este mercado se vendían frutas y verduras provenientes de los huertos del Delta. Luego se incorporaron puestos de artesanía y dejó de funcionar como puerto. Actualmente se destaca por la fabricación de muebles de caña y cestería de mimbre.
Sobre el Río Sarmiento y Arroyo Los Reyes a 20 minutos de la Estación Fluvial de Tigre, vale la pena visitar este curioso museo. El maestro, que fue Presidente de la Nación, trajo el mimbre al Delta. Como el suelo era tan fértil, seguida se desarrolló y hasta hoy constituye parte fundamental de la industria de la zona. En 1928, el Consejo Nacional de Educación hizo la primera reconstrucción de este solar, que fue inaugurado ese año como museo. En 1996 la Municipalidad de Tigre lo recubrió con un templete vidriado y una pasarela en su contorno para preservarlo. Es un lindo lugar, arbolado y con bancos públicos para descansar a la sombra.
El sector más poblado y turístico es un territorio enmarañado de ríos, arroyos y canales que unen el Paraná de las Palmas con el río Luján. En sus avenidas acuáticas ríos Sarmiento, Capitán y San Antonio- bordean los mejores barrios del Delta, quintas, recreos y hospedaje que asoman a la orilla entre huertos arbolados y jardines poblados de hortensias y azaleas. El paraje Tres Bocas es una esquina de aguas, a media hora de viaje, donde es posible descender, almorzar al aire libre y pasear a pie por las orillas del río Sarmiento y del arroyo Abra Viejo, bastante urbanizados. El arroyo Rama Negra, calmo y arbolado, se recorre en una hora de caminata, desde el río Capitán (50 minutos de Tigre) hasta el pintoresco Espera, pasando por la casa donde el maestro Marcos Sastre (1808-1887) vivió y escribió El Tempe argentino libro romántico y ecológico que presenta al Delta como tierra de promisión. Pasando el Paraná de las Palmas, el Delta se vuelve más solitario y selvático, con bosques en galería y riachos tapizados por camalotes varados en el agua. En una esquina del Paraná de las Palmas perdura El Tropezón, clásico hotel de madera donde fue a suicidarse el escritor Leopoldo Lugones (1874-1938).
