Esta pintoresca localidad se encuentra a orillas del océano Atlántico, junto a la desembocadura del arroyo homónimo, a 71 km de Tres Arroyos.
Su núcleo urbano está cruzado por amplias avenidas; como la avenida Costanera tiene 150 m de ancho. Su edificación es moderna, no obstante aún conserva algunos edificios antiguos, rodeados de jardines. Se destacan los novedosos diseños de sus galerías, de gran atractivo para los turistas que gustan de los paseos de compras.
Claromecó significa en idioma araucano "Aguas claras entre juncales". Este balneario se encuentra en tierras que antiguamente pertenecieran a la familia Bellocq y que fueran tomadas por la provincia de Buenos Aires. Los Bellocq comenzaron a darle forma al incipiente balneario construyendo los primeros 9 chalets, de los que aún se conservan algunos. En el sector de playas llamado Dunamar, gran vivero dunícola debido a Ernesto Friddolín Gesell (hermano de Carlos Gesell) se levantan hermosas edificaciones de estilo alpino y confortables cabañas.
La práctica de la pesca comercial es uno de los motorizadores económicos de la población estable. La introducción de la modalidad pesquera fue hecha por inmigrantes catalanes, que con lanchas pesqueras iniciaron tal emprendimiento, logrando extender la costumbre e instalándose al tiempo varias industrias pesqueras.