El cerro Hielo Azul, posee el glaciar más importante de la zona y es así llamado por el increíble color azul profundo que toman sus grietas.
Partiendo de El Bolsón, al llegar al río Azul, deberá subir bruscamente hasta dar con los restos de una construcción antigua y seguir el sendero, hasta arribar al Mallín de los Palos.
Una vez atravesado el mallín, el camino sigue ascendiendo y se puede apreciar el río Raquel que corre a más de 200 m debajo. A continuación se llega al arroyo Teno, cuyo contorno lo llevará al refugio en medio de un magnífico bosque de lengas. Allí aparece la rústica cabaña de troncos donde es posible descansar y proveerse de todo lo necesario. También podrá deleitarse con los típicos asados de cordero o con deliciosos quesos y dulces caseros.
Barda Negra: Esta cumbre está a 2150 m sobre el nivel del mar, forma parte del macizo del Hielo Azul y se encuentra al sur del glaciar.
Por la vía normal no tiene pasajes técnicos ni requiere de equipo. Es una caminata que no está señalizada, pero que con buen criterio y buen sentido común, permite acceder a una hermosa cumbre con imponente vista del valle del río Raquel, el glaciar, los volcanes chilenos y muchas otras cumbres cordilleranas.
El Cajón del Azul es uno de los mas bellos paseos de El Bolsón. Se realiza a pie (Trekking) o a caballo, es posible contratar el servicio guiado en las agencias de turismo de El Bolsón. El camino al Cajón consta en un sendero que se interna en la hermosísima reserva forestal de la Cordillera de Los Andes. Este camino atraviesa bosques de cipreses, arroyos, pacíficos valles, elevaciones, pasarelas de troncos y bordea un tramo del Río Azul antes de llegar al denominado Cajón que es un cañadón de roca de unos 40 m de altura por 1 m de ancho dentro del cual se "encajona" el Río Azul.
Hay un pequeño puente en la parte superior que permite cruzar el Río dando tres pasos y admirando al mismo tiempo su color y la rítmica belleza de sus reflejos en los muros de piedra. También es posible descender casi hasta el Río por una cornisa empinada e introducirse en esa suerte de cueva de roca.
Pasando el Cajón se llega al camping del Cajón del Azul, que cuenta con algunas comodidades. Y mas allá del camping se encuentra el "Refugio de Atilio" el cual cuenta con alojamiento, duchas (agua caliente), comidas, cerveza y dulces artesanales y una granja orgánica. Atilio es un antiguo poblador del lugar que abrió sus puertas a los visitantes. Se recomienda: Visitar las cuevas, el río y el bosque virgen.
En el Cajón del Azul, siguiendo el sendero que parte hacia el norte, una vez cruzado el último puente (de troncos), es posible hallar picadas que descienden a majestuosos pozones y tomar sol sobre rocas enormes que permiten observar profundos caudales de agua cristalina pasando a su lado. Bellezas inabarcables: en estos sectores el Río Azul posee una fuerte correntada, y serpentea entre peñascos colosales que sobresalen de sus aguas en entre las paredes pétreas que forman el llamado cajón. No es posible bañarse en estas partes del río debido a la peligrosidad ocasionada por la corriente y las roca, pero si es posible observar su belleza. Hay piedras muy grandes, en las cuales unas 10 personas pueden sentarse a escasos centímetros del agua, que es verde azulada, helada y pura.
Mas adelante, cuando el cajón termina, existen otros pozones, más grandes y profundos que si permiten a los más osados darse chapuzones en las aguas frescas que descienden del glaciar en alta montaña. Desde las rocas, puede verse hacia arriba, la continuación del Río Azul, que produce escalonadas cataratas, corrientes, y se refleja en la piedra con ases dorados, y hacia abajo, perdiéndose en un sinuoso descenso. Hacia arriba, más allá de la roca y algunas cascadas de arroyos que terminan en el cajón, los bosques de ciprés coronan la vista, y del lado oeste, se alzan las montañas distantes.
El Cajón, es un cañadón cuyo ancho varía de acuerdo a la altura del recorrido, por lo general son 40 m de profundidad.
Se encuentra enclavado en un paisaje de esquí alpino, en el cerro Perito Moreno, a 25 km de El Bolsón, rodeado por cascadas y arroyos de deshielo. Es un centro de deportes invernales con muchos años de funcionamiento, últimamente ha registrado un importante crecimiento, debido a que anualmente se van agregando servicios y medios de elevación. Allí existen varios circuitos con diversos grado de dificultad, entre los que se destacan los de los cerros Hielo Azul, Lindo y Tres Picos.
En el cerro, son imperdibles las fabulosas panorámicas del Mallín Ahogado, el cordón Serrucho, el Abra de los Repollos y el cordón Piltriquitrón.
Pueden realizarse caminatas, por diferentes senderos señalizados con detalles de interpretación.
Este pequeño y acogedor trencito de trocha angosta recorre la tierra de la Patagonia desde hace más de 50 años.
Desde los andenes de la estación El Maitén, un pueblo auténticamente ferroviario que mantiene viva su historia, el pasajero puede subirse a esta leyenda y disfrutar entre el bullicio de silbatos y el vapor de la caldera, de un paisaje inolvidable observando los mismos paisajes de aquella época que se conservan intactos.
Un guía profesional acompaña a los viajeros durante todo el recorrido y además también se puede visitar el museo y los talleres del viejo expreso patagónico.
Paraje asiento de una comunidad aborigen, donde se encuentra la pequeña cascada de la Virgen Misionera, rodeada de un paisaje pintoresco.
Situado dentro del valle de Epuyén, el lago ocupa una depresión alargada y estrecha, orientada de noroeste a este. Solitario, de coloración azul-plateada, la cuenca se caracteriza por la ausencia de glaciares, playas bajas de canto rodado, limitadas al oeste por cerros de mediana altura pertenecientes al cordón Derrumbe. Graníticos los más, de cumbres nevadas y laderas cubiertas por frondosos bosques, todo el conjunto presenta un marco encantador, que es reflejado en las tranquilas aguas del espejo.
Es una aldea de artesanos y mapuches al pie del Cerro Pirque, con una fuerte ideología por la protección de nuestra naturaleza autóctona.
Puerto Bonito, es una pequeña bahía del Lago Epuyén es un pacífico escenario para el descanso y la pesca.
Conocida como "La Capital de la Fruta Fina", esta villa cercana a El Bolsón, se encuentra en la provincia de Chubut, apenas se cruza el límite interprovincial. Posee un microclima que favorece el cultivo de frutillas, cerezas, frambuesas y otras especies de frutas, por lo que anualmente la villa es sede de la Fiesta Nacional de la Fruta Fina.
Se ha convertido en un pequeño valle de chacras rodeado por cerros tupidos de bosques. La catarata Corbata Blanca es ideal para hacer un trekking, un salto que se precipita al vacío por más de 90 m.
Desde la punta de una gran cornisa de la Loma de Medio se observa todo el Valle Azul y sus chacras, el trazado del Río Azul hasta desembocar en el Lago Puelo, los cordones cordilleranos y el majestuoso Cerro Tres Picos.
Muy próxima al Jardín Botánico y oculta en una gran grieta natural encontramos los dos gigantescos saltos de más de 30 m de altura de la Cascada Escondida.
Es un punto panorámico único.
Mezcla de colores, formas y texturas, la Feria Regional de la comarca andina del Paralelo 42 inunda de magia a la ciudad de El Bolsón desde hace más de treinta años. Martes, jueves, sábados, domingos y feriados el pie del cerro Piltriquitrón se viste de fiesta y a ella acuden los numerosos hippies de todas las edades que, a lo largo de más de 250 puestos, ofrecen productos artesanales diversos y atractivos.
Considerada como una de las ferias más grandes de Sudamérica, esta comunidad de puestos llamativos y tentadores ofrece una variada y cuantiosa producción artesanal: cerámicas, lanas, trabajos en cuero, cuchillos forjados a mano, instrumentos musicales, juegos, tallas en madera, vitraux, flores secas, velas en su encantadora diversidad, dulces y quesos caseros, frutas finas, y otras tantas piezas nacidas de la originalidad y pasión de los artesanos que habitan esta zona de Río Negro.
Fiel expresión de la cultura de la región, que pareciera flotar en el aire en cada paso del recorrido, esta feria artesanal invita a dejarse llevar por las extrañas sensaciones que invaden el cuerpo desde el momento en que se llega hasta ella. Encantamiento, fascinación, frenesí, tentación, todos los sentidos se verán encandilados por las bellezas exóticas y deslumbrantes de la feria y sus artesanos.
Presenta una colección ornitológica de aves patagónicas del país y del mundo, aquí se puede apreciar el valioso ejemplar del halón peregrino.
Anexo del Parque Nacional Los Alerces desde 1937, el Parque Nacional Lago Puelo adquiriría su independencia en el año 1971 con la premisa de preservar específicamente la cuenca del río que le diera nombre. Abarcando un superficie de 23.700 hectáreas ubicada hacia el noroeste de la provincia de Chubut y sobre el límite internacional con Chile, protege un paisaje único en la región norpatagónica en el que se destacan especies vegetales y cristalinos cursos de agua.
Caracterizado por unas particulares conformaciones boscosas, y un clima privilegiado a causa de su escasa altura sobre el nivel del mar, el Parque Nacional Lago Puelo alberga al lago homónimo, así como a un sistema de ríos y arroyos de origen glaciario, todo lo cual contribuye a pintar un fondo paisajístico turquesa profundo. Pero allí no acaba su belleza natural, sino que la misma se expande en especimenes vegetales autóctonos y exóticos.
El Parque Nacional Lago Puelo alberga especies de la flora propia de la selva valdiviana chilena integrando el avellano, el tique y el ulmo a los bosques andinopatagónicos conformados por ejemplares de ciprés de la cordillera, coihue, espino azul, radal, arrayán y otros. Por su parte, la rosa mosqueta invade el territorio diseminándose por los más vastos sectores del parque.
Algunos de los mamíferos propios de la región son el pudú, el huemul, el zorro colorado, el puma y el hurón menor; mientras que entre las aves, las más reconocidas son el huala, el pato volador, la bandurria, el carpintero pitío, y el cisne cuello negro. En los ríos y lagos, el protagonismo de los peces recae sobre la autóctona trucha criolla y los exóticos trucha arco iris y salmón encerrado.
Realzados a unos 4 km de la localidad de Lago Puelo, y a unos 19 km del pueblo de El Bolsón, los hermosos paisajes de este Parque Nacional extienden sus áreas propicias para el desarrollo de diversas actividades al aire libre, destacándose la pesca deportiva, el trekking y el campamentismo. En tanto, la zona sur, se exhibe culta y arqueológica ostentando representaciones de arte rupestre sobre bloques erráticos y paredones rocosos, a lo largo del valle, siguiendo el recorrido del río.
También conocido como Cerrito de la Cruz, asegura a quien se lanza al mini-trekking de 2 km, una meta de inigualable belleza, ya que el final del recorrido pondrá ante la mirada del excursionista una espectacular vista panorámica de la ciudad de El Bolsón.
Situado frente al Cerro Piltriquitrón, el Cerro Amigo ha sido declarado Reserva Municipal, plasmando su atractivo en el encantador bosque de cipreses que lo pinta de tonalidades verdes y marrones.
Naturaleza, aire puro, turismo activo, el Cerro Amigo constituye un paseo de dificultad leve, ideal para realizar en familia oxigenándose y dejándose llevar por agradables sensaciones, propias del paisaje que acompaña el recorrido.
Para acceder a este peñasco, la caminata debe realizarse por Ruta Nacional Nº 258, girando luego a la izquierda por el callejón de Merino. A partir de allí, continuar unos 100 m hasta dar de frente con una casa situada al final de la calle. Entonces, doblar nuevamente a mano izquierda y seguir a paso firme hasta hallar el cerro.
Conformado por fascinantes obras artísticas talladas en madera en pleno bosque rionegrino, este lugar simboliza la unión solidaria entre el arte y la naturaleza.
Todo tuvo su origen en 1982, a partir de un incendio que azotó el bosque de lengas situado en una ladera del Cerro Piltriquitrón, a escasos kilómetros del centro de El Bolsón; situación que hacia fines de la década del 90 instó a un grupo de artistas a tomar una posición al respecto. El resultado fue esta incomparable muestra ambientada, exhibidora de 31 esculturas realizadas sobre troncos que resistieron el fuego.
Asombrosas formas y significados se apoderan del lugar a lo largo del paseo de esculturas: Duende Vegetal, Guardián del Bosque, Reposo, Ypuche, Todos Nosotros, son algunos de los nombres que señalan las apasionantes y originales creaciones.
Enmarcado por un paisaje que ha logrado recuperar parte de sus verdes, el Bosque Tallado constituye un espacio único cuya visita se ha tornado ineludible para todo aquel que disfruta de unas reconfortantes vacaciones en El Bolsón.
Para acceder al Bosque Tallado, se debe transitar por Ruta Nacional Nº 258, hacia la plataforma del Cerro Piltriquitrón, siguiendo los carteles indicativos.
Paisaje verde protector del patrimonio natural de la provincia de Río Negro, la Reserva Forestal Loma del Medio- Río Azul, se extiende en una superficie de 2400 hectáreas, con una proporción muy importante de bosque de Ciprés de la Cordillera. Es que, justamente, la finalidad de esta área protegida tiende a la preservación y administración de uno de los ecosistemas más representativos de dicha especie.
Dentro de la reserva pueden visitarse espacios de interés turístico como el Mirador del Azul que invita a contemplar el valle en toda su extensión; la formación Cabeza del Indio y los pintorescos senderos que conducen a ella; y el Jardín Botánico diseñado en un área de bosque preexistente constituido por especies nativas como ciprés, ñire, coihue, radal, maitén y laura, entre otras.
La reserva se encuentra al oeste de la plata urbana de El Bolsón.
Formación rocosa originada a partir del trabajo erosivo de los glaciares sobre un paredón que apunta hacia el oeste en la Loma del Medio, Cabeza del Indio constituye además un excelente punto panorámico del valle en toda su extensión.
Existen dos alternativas de acceso a este atractivo cuya particularidad consiste en su semejanza a un rostro humano de perfil. Una de ellas consiste en internarse en el bosque por un sendero de hermosura natural; y la otra en bordear la cornisa por un sendero desafiante y encantador.
La mejor época para lanzarse en esta aventura la conforman las estaciones de primavera y verano. Una vez atravesada la Loma del Medio, y a orillas del Río Azul, aparecerá un área de campings, fogones y espacios de recreo, ideal para disfrutar con el calorcito.
Imponentes, fascinantes e inmaculados saltos de agua que en el marco de espectaculares paisajes verdes, cautivan la mirada y las sensaciones de quien llega hasta ellas en busca de belleza y relax.
Cascada Escondida: es la más atractiva del circuito, y la primera en alcanzarse. Además de su hermosura oculta tras el entorno natural, contiene en su predio de influencia un Jardín Botánico donde contemplar especies nativas y exóticas; y pozos de agua perfectos para disfrutar de refrescantes baños. (4 km al norte de El Bolsón por RN 258, siguiendo luego un camino de ripio).
Cascada del Mallín: originando dos escalones de más de 20 m de altura total, y enmarcada por una atrapante vegetación nativa, esta atractiva cascada es también fuente de energía del paraje. Capaz de exaltar todos los sentidos del visitante, incluye además en su área una acogedora parrilla donde deleitar el gusto. (Por el mismo camino, a 6 km de la RN 258).
Cascada de la Virgen Misionera: pequeño salto emplazado en la Reserva Mapuche de la Rinconada de Nahuel Pan. (Al noreste de El Bolsón por el Camino de los Nogales).
Cascada de la Virgen: impactante choque de agua ornamentado por un área recreativa. (Sobre RN 258, pocos km al norte de El Bolsón).
La Catarata: cristalinas aguas cayendo desde 90 m de altura constituyendo un espectáculo natural indescriptible. (Hacia el este de la localidad de El Hoyo, situada 15 km al sur de El Bolsón).
Su cima se encuentra a 2.260 m sobre el nivel del mar. El mismo protege a la ciudad de los vientos del desierto patagónico.
Excelente punto panorámico, centro energético confortante, lugar de contacto directo con el cielo, de todos estos modos y otros tantos más se describe al Cerro Piltriquitrón, cuyo nombre de origen araucano lo confiesa colgado de las nubes. Emplazado a pocos kilómetros del centro de El Bolsón, y visitado permanentemente por turistas de diversas procedencias, este cerro constituye un atractivo múltiple e inomitible de la comarca andina.
Espacio perfecto y recomendable para vivir unas vacaciones verdaderamente relajantes y distendidas, El Bolsón incorpora la travesía del Cerro Piltriquitrón en un lugar privilegiado de su cartelera turística. De belleza natural y ambiente saludable, este atractivo presenta alternativas diversas a lo largo del recorrido hacia la cumbre: caminatas por senderos delimitados; contemplación de paisajes incomparables desde el mirador; descanso en el refugio de montaña; deleite de excelencias gastronómicas; cabalgatas; admiración de artesanías; desafiantes vuelos en parapente; y muchas más.
Se accede a esta excursión, partiendo desde la ciudad de El Bolsón, hacia el sur, por Ruta Nacional Nº 258, y ascendiendo luego por un angosto camino de montaña hasta hallar la plataforma del Cerro Piltriquitrón. Aproximadamente a 11 km del casco urbano.
