Esta Reserva Natural fue creada en 1968 para la protección de preservación de una muestra representativa del oeste formoseño. Donde se conjugan un sector de la zona árida chaqueña con muestras muy ricas de selvas en galerías y costas del río y arroyo. Tiene una diversidad florística muy importante destacándose la existencia de bosques abiertos con quebracho blanco, mora, palo bolilla, caspi, zapallo y otros. En los sectores sometidos a inundaciones y desorden periódicos se pueden observar especies como palo bobo, palo flojo, chaña, etc.
La Reserva Natural Formosa pertenece a la eco-región chaco seco cuyo clima es subtropical cálido, con temperaturas máximas absolutas par el continente. Las precipitaciones son estivales y varían entre 500 y 700 mm.
Los ríos Teuco (o Bermejo) y Teuquito recorren este manto verde modificando las postales. Sobre sus orillas crecen sauces criollo y otras especies que aprovechan los desbordes para desarrollarse en todo su esplendor.
Beneficiada por una nutrida flora, también cuenta con diversas especies faunísticas, destacándose el oso hormiguero grande o bandera, en peligro de extinción. Los avistajes de aves permiten descubrir especies como el loro hablador, las charatas y el carpintero de los cardones. Completan este escenario único, lagartijas, camaleones, yacaré ñato, tatú carreta, entre otros.