Se construyó en el año 1911 para acoger una pista de patinaje sobre hielo; luego, fue transformado en un salón de baile popular, y a partir de 1912, el tango tomó su lugar protagónico. Los salones del palacio fueron modificados por el arquitecto Alejandro Bustillo e inaugurados como Salón de Bellas Artes en 1932. Se encuentra en Posadas 1725 y desde el año 1978 funcionan allí las Salas Nacionales de Cultura y Exposición o Salón Nacional de Artes Plásticas. Sus salones son grandes espacios circulares iluminados durante el día por su cúpula de vidrio. Allí se ofrecen exposiciones temporarias de pintura y escultura. Cerca de este palacio se encuentra la plaza Alvear, de donde se puede apreciar una vista muy linda de la zona.
En la Plaza Naciones Unidas, circundada por la Av. Libres del Sur, Av. Tagle y Av. Figueroa Alcorta, se exhibe una flor de aluminio y acero de grandes dimensiones. Pesa aproximadamente 18 toneladas y posee una altura de 23 m. Fue una donación del arquitecto argentino Eduardo Catalano, y su emplazamiento se hizo en el 2002. La inmensa flor iluminada por 60 artefactos en la noche, se ve además reflejada en una pileta de agua de 45 m de diámetro, rodeada de senderos y caminos perimetrales. El conjunto forma parte de un espacio parquizado de cuatro hectáreas que está custodiado por el edificio del Canal 7 y la imponente Facultad de Derecho y Ciencias Sociales. La enorme obra de metal se conforma de seis pétalos que pesan aproximadamente 3.500 kilos cada uno, y están montados sobre una estructura cónica. En su interior se hallan los pistilos, conformados por cuatro columnas cónicas de diferente altura. La iluminación interna se compone de dos reflectores por pétalo y dos reflectores concentrantes. El sistema de riego del césped es subterráneo: sesenta aspersores y ochenta toberas para mantenerlo siempre prolijo. La gigantesca flor funciona por medio de un complejo mecanismo que ordena a los pétalos moverse con los primeros rayos del sol hasta abrirse totalmente. Abarca un diámetro de 32 m. Luego, se cierra al atardecer y el diámetro disminuye a 16 m. Sus movimientos se controlan por medio de un sistema computarizado.
Palacio señorial erigido en el 1637 de la Av. Alvear. El arquitecto Le Monnier terminó de construirlo en 1909 por encargo especial de Juan Antonio Fernández y Rosa de Anchorena, quienes viajaron a Europa a radicar y, por lo tanto, jamás ocuparon la residencia. De 1922 a 1928, durante la presidencia de Máximo Marcelo Torcuato de Alvear, se alquiló este pintoresco edificio para establecer la residencia del mandatario. En 1930 fue adquirido por Adelia Harilaos de Olmos, quien finalmente lo donó al Vaticano en 1949 para que sirva de sede diplomática en el país. El papa Juan Pablo II se alojó en él durante sus dos visitas realizadas a la Argentina en 1982 y 1987.
Impresionante edificio de estilo neoclásico francés, construido en 1911 como residencia. El proyecto evoca los edificios de la plaza de la Concorde de París y el diseño pertenece al arquitecto René Sergent. En cada uno de los salones dejaron su sello los más importantes decoradores de Europa. El gobierno nacional lo adquirió en 1937 para transformarlo en museo. La colección que exhibe incluye tapices flamencos, porcelanas, marfiles, platería, cristalería y mobiliarios barrocos. La mayoría de dichos objetos pertenecieron a la aristocrática familia propietaria del edifico: Matías Errázuriz y Josefina de Alvear. El pórtico de acceso a este actual museo se inspira en el diseño del Petit Trianon del palacio de Versailles, en Francia. Se sugiere apreciar el óleo de El Greco, en el Gran Hall, en la planta baja, que es el salón de mayor dimensión. Los salones principales del esplendoroso palacio conducían hacia la terraza, de donde se obtiene una vista panorámica interesante de los verdes bosques de Palermo. En el subsuelo del museo se encuentra una interesante librería de arte.
Estas dos extensas plazas están separadas por la calle Tagle y se encuentran escoltadas por la Av. del Libertador y Av. Figueroa Alcorta. Son el límite entre dos hermosos barrios para recorrer: Palermo (Plaza Chile) y Recoleta (Plaza Uruguay). En la Plaza República Oriental del Uruguay se observa además de las variadas especies de plantas y los frondosos árboles, el monumento a José Gervasio Artigas (1764-1850), considerado el fundador de la nacionalidad uruguaya.
La figura ecuestre de bronce representa al fundador del diario La Nación y presidente de la nación entre los años 1862 y 1868, esta a su vez se encuentra rodeada de alegorías de mármol blanco sobre un basamento de granito rojo pulido.
El Museo Nacional de Bellas Artes abrió sus puertas en 1896 con la dirección del pintor Eduardo Schiaffino. Se trata de la institución con el mayor acervo del país y uno de los principales de América. Sus 32 salas de exposición, entre la planta baja y los dos niveles superiores, reciben en forma permanente exposiciones de nivel nacional e internacional de los rubros pintura, escultura y grabado, entre otros. A estas salas se le deben añadir el pabellón de las muestras temporarias en la planta baja, la sala de exhibiciones de arquitectura, y los dos patios de esculturas con una fastuosa vista hacia la Av. Figueroa Alcorta y Facultad de Derecho y Ciencias Sociales.
El edificio actual del Museo fue habilitado en 1933, en medio de los parques y jardines de la Recoleta. Posteriormente fue modificado y ampliado en la década del cuarenta, sesenta y ochenta. Las salas no solo son espaciosas, también están bien iluminadas, lo que brinda un menor cansancio o movilidad del visitante, conceptos adoptados por los modernos museos europeos y norteamericanos. Se han abierto sedes en el interior en las ciudades de Córdoba y Neuquén. Ofrece una muestra permanente con una muy completa colección de obras argentinas de los siglos XIX y XX, de los siguientes artistas: Prilidiano Pueyrredón, Pellegrini, Morel, Della Valle, Sívori, Spilimbergo, entre otros; y una importante colección permanente de obras maestras de artistas extranjeros, entre los que se cuentan El Greco, Goya, Manet, Monet, Degas, Rodin, Renoir, Toulouse-Lautrec y Van Gogh.
Esta plazoleta, cuyo nombre evoca al santo patrono de la ciudad de Buenos Aires, posee una barranca que se extiende desde la Av. Alvear hacia la calle Posadas. Destaca por la variedad de árboles y plantas que fueron plantados, en su mayoría, en el siglo XVIII por los conocidos monjes recoletos cuando habitaron en el convento de Pilar. Cerca de allí, entre la Av. Alvear y Av. Quintana, en la plaza Ramón J. Cárcamo, se encuentra el monumento a Ramón Falcón, jefe de la policía de la ciudad en el año 1909. Ese año, Falcón perdió la vida en manos del anarquista Simón Radowitzky, quien fue arrestado y trasladado al presidio de Ushuaia, en Tierra del Fuego, al sur del país.
Este imponente monumento ecuestre, diseñado por el talentoso francés Bourdelle, se halla en las intersecciones de la calle Posadas y la Av. Alvear, y posee una interesante perspectiva desde la barranca de la Recoleta. La obra, que llegó desde Francia en 1925, descansa sobre un pedestal de granito pulido, obra del arquitecto Alejandro Bustillo (1889-1982).
Con uno de sus extremos situado en la intersección de Av. del Libertador y Av. Callao, es un atractivo parque ubicado en una zona pintoresca de la ciudad. Cuenta con la moderna escultura Torso Masculino, del artista colombiano Fernando Botero. Entre este vistoso parque, construido en honor al paisajista francés Carlos Thays, y el ala sur de la Facultad de Derecho y Ciencias Sociales, se encuentra la famosa obra "La Cautiva", cerca de la intersección de Av. Pueyrredón y Av. Figueroa Alcorta. La escultura pertenece al argentino Lucio Correa Morales, que retrataba a indígenas y criollos. La escultura muestra a una india cautiva sentada en un resto de pared de adobe, que observa con melancolía y dolor la morada que jamás volverá a habitar, acompañada solo por sus hijos y un perro. En esta zona se ubica también, próximo a la parte trasera de la facultad citada, el Centro Municipal de Exposiciones del gobierno de la ciudad, donde se llevan a cabo importantes eventos y ferias.
En los Albores del siglo XVIII se instalaron en la actual zona de la Recoleta los frailes Recoletos Descalzos, una orden de monjes españoles que pertenecían a los franciscanos del rey de España. En 1732, el arquitecto jesuita Giovanni Andrea Bianchi diseñó para ellos la iglesia del Pilar, de estilo colonial, que sería concluida por Juan Bautista Prémoli. Aún se conservan los azulejos Pas-de-Calais que decoran la cúpula de la torre en su extremo izquierdo, y en el extremo derecho el original reloj esférico que está en su espadaña (campanario hueco que permite observar las campanas) desde 1866. En su interior, en el altar mayor y las seis capillas laterales, se aprecia la impronta del barroco tardío. Pese a los ecos europeos, tanto religiosos como arquitectónicos y decorativos, en el frontal del altar de plata repujada destaca un singular sol incaico. Este detalle, como el de la cabeza de los ángeles de los retablos, recuerda el aporte anónimo de los artistas indígenas en la decoración del templo. Entre 1930 y 1945, el arquitecto André Millé se encargó de devolverle su aspecto original. Desde la Av. Quintana se obtiene una interesante vista panorámica de dicha iglesia con sus atractivas rejas. Ha sido declarada Monumento Histórico Nacional.
Con motivo del Centenario de la Revolución de Mayo de 1810, la colectividad francesa obsequió este monumento que se ubica en el centro de la Plaza Francia, entre la calle Levene y la Av. del Libertador. Se trata de una alegoría de la gloria de Francia y Argentina. Destacan los bajorrelieves de bronce y las figuras de granito rojo y mármol, salidos de las manos del escultor francés Peynot. La Plaza Francia es muy pintoresca, con barrancas que concluyen en la Av. Libertador, y parte de una zona verde muy atractiva para recorrer a pie.
Es un área de gran atracción turística, rodeado de jardines, museos y centros culturales, se halla este complejo de la decoración. En él se encuentran todas las propuestas que se requieren para decorar el interior de un hogar. Buenos Aires Design alberga, en dos niveles, sesenta alternativas comerciales con las más importantes marcas de diseño y decoración, además de diecisiete góndolas que acompañan las tendencias del mercado arquitectónico. Esta propuesta se complementa con una espectacular terraza de tres mil metros cuadrados, en donde se hallan doce restaurantes que ofrecen alternativas gastronómicas diversas: desde un tradicional asador criollo, hasta una filial del conocido Hard Rock Café.
Es un complejo de entretenimiento y esparcimiento inaugurado en el año 1999. Cuenta con modernas salas de cine, librerías, tiendas de discos, restaurantes, bares temáticos, pubs, patio de comidas y estacionamiento para vehículos. Se sitúa entre las calles Vicente López, Junín y Uriburu. Se recomienda visitarlo (como en la mayoría de los lugares y paseos de la ciudad) tanto de día como de noche.
Estas elegantes avenidas, ubicadas en forma paralela, son de clarísima influencia europea, sobre todo parisina. Y vale la pena recorrerlas. Poseen mansiones tradicionales y edificios de categoría, además de reconocidas boutiques internacionales de diseñadores de renombre como Armani, Ralph Lauren, Versace, Ermenegildo Zegna, Hermes, Kenzo, Escada, Nina Ricci y Louis Vuitton, entre otros. Algunas casas de moda se han hecho traer el mobiliario desde su lugar de origen. La zona fue elegida por tradicionales familias porteñas para edificar sus viviendas, por ello es que aquí se hallan mansiones de fines del siglo XIX y principios del XX. Entre las principales mansiones destaca la de Alzaga Unzué (Cerrito 1455); el edificio que perteneció a los Ortiz Basualdo, actual embajada de Francia (Cerrito 1390); y el denominado palacio Pereda, ahora embajada de Brasil (Arroyo 1130).
Concebido durante la denominada Belle Epoque, representa un símbolo de aquella época. Consta de once pisos, cinco subsuelos, espléndidos salones y restaurantes decorados con total sobriedad. Los ambientes abarcan los estilos intermedios entre Luis XIV y Luis XVI, y algunos de ellos reproducen piezas de renombre del arte decorativo francés. En 1984 un grupo de empresarios argentinos se hizo cargo del hotel. Se conservó el estilo pero se le imprimió algunas modificaciones e incorporó una sofisticada tecnología. El hotel cuenta con 210 habitaciones. Incluye 125 suites elegantemente decoradas en estilo Luis XV e Imperio. Cuenta con Business Center, Health Club, y se puede disfrutar de la más alta gastronomía en L'Oringerie, Jardín D'Hiver, y en el único Relais Gourmand en Argentina: La Bourgogne, con su exquisita cocina francesa, obra del inigualable chef francés Jean Paul Bondoux. En 1993 el Alvear Palace Hotel fue designado miembro de The Leading Hotels of The World. A partir de allí inició una nueva etapa, donde el desafío es la búsqueda permanente de la excelencia.
Histórico y tradicional edificio, con doble entrada por el 1245 de la majestuosa calle Posadas o el 750 de la elegante Av. del Libertador, donde funciona un shopping que alberga las marcas nacionales y extranjeras más reconocidas. Se ofrecen variados productos musicales, libros, joyas, lencería de calidad, pieles, artículos de cuero, y toda clase de ropa formal e informal. Fue construido a principios del siglo XIX por el arquitecto Waldorp, a solicitud de la familia Bullrich. En sus inicios, fue casa de remate de toda clase de objetos de colección, y allí se remató hasta caballos de pura sangre. El edificio cuenta con seis salas de cine equipadas con alta tecnología. También hay un atractivo patio de comidas que ofrece desde fast food hasta menúes de haute cuisine. Los más pequeños tienen un lugar especial con interesantes atracciones.
Sobre lo que fue un antiguo claustro de los padres recoletos en el año 1732, se erige desde 1980 un prestigioso y concurrido centro cultural. Una de sus características es que el edificio conserva el estilo barroco colonial, y alrededor de los patios de Naranjos y de la Fuente se hallan importantes esculturas. Cuenta con 25 auditorios y ofrece exposiciones y muestras de pintura, escultura, fotografía y cine, entre otras manifestaciones artísticas. Dentro de este centro se halla el Museo Participativo de Ciencia Se encuentra junto a la iglesia de Nuestra Señora del Pilar.
El monumento, obra del escultor Joris y el fundidor Lauer, se inauguró en el año 1900 en honor al primer intendente de la ciudad de Buenos Aires. Se encuentra en la plaza Intendente Alvear. En la parte inferior de la columna del monumento se ubica el busto de Torcuato de Alvear, y en su parte superior se advierte la figura alada que representa La Gloria. Los restos de Torcuato de Alvear y su hijo, Máximo Marcelo Torcuato de Alvear, que fue presidente de la República Argentina, reposan en el Mausoleo de la Familia en el Cementerio de la Recoleta.
Fundado en el año 1822 en una parte del huerto que perteneció a los frailes recoletos, el cementerio de la Recoleta, originalmente llamado Miserere y luego del Norte, es considerado como uno de los cuatro cementerios más valiosos en materia arquitectónica y artística en el ámbito mundial. Este cementerio, que nació republicano, se convirtió en el más aristocrático del país, cuando la epidemia azotó a los barrios del sur en 1870 y 1871, lo que provocó el éxodo de las familias pudientes hacia las tierras del norte. Los estilos de construcción de las bóvedas y mausoleos, pertenecientes a las más aristocráticas familias y destacadas personalidades argentinas, son el neocolonial, neoclásico y barroco, y hacen sumamente interesante su visita, ya que algunos de ellos son verdaderas obras de arte. Destaca su pórtico de entrada neodórico, de estilo griego, y más de setenta bóvedas han sido declaradas Monumento Histórico Nacional. El cementerio puede visitarse diariamente de 9:00 a 19:00 horas. Se sugiere recorrerlo en compañía de un guía especializado.