Centro Recreativo que en su extensión de 500 hectáreas invita al esparcimiento, la práctica de deportes, y la experiencia de inolvidables campings. Enmarcado por una frondosa vegetación que procura frescura al lugar, y acondicionado con todas las comodidades y servicios, destacándose el sector de parrillas, la proveeduría y los juegos infantiles, el Parque Don Tomás funciona como un imán turístico y activo. Natación, tenis, fútbol, ciclismo, atletismo, vóley, básquet, sóftbol, son apenas algunas de las opciones de las que puede disfrutar en este enérgico espacio; y por si ello fuera poco, una imponente laguna se ofrece tentando con sus encantos a la práctica de pesca, canotaje, windsurf, kayak, sky acuático y motonáutica. Entretenimiento, diversión y actividades saludables, las alternativas se multiplican en este parque de la ciudad de Santa Rosa atrayendo a multitudes hacia su predio. Recreo La Isla, Isla de los Niños, Mirador de la Cruz, El Faro, Club Náutico, Estancia La Malvina, El Carrusel, constituyen algunos de los paseos ineludibles. Tan ineludibles como los recorridos a bordo de El Pamperito (trencito de trocha que recorre el complejo), El Puelchito (tren turístico cuyo circuito parte desde la plaza central de la ciudad pasando por el parque) o El Salitrero (embarcación que parte del muelle y pasea durante tiempo por la laguna).
Se ubica a 35 km de la ciudad de San Rosa, en el Valle de Quehué. Este parque presenta tres ambientes diferentes: el monte, la laguna y el médano con riquísima flora y avifauna y gran riqueza de testimonios históricos de la primera década del siglo XX. El predio esta constituido por 7.600 hectáreas cercadas , de las cuales 1.200 hectáreas correspoden al área turística. Esta reserva protege en su extensión un bosque de caldenes, además de otras especies de flora y una riquísima avifauna. Un Centro de Interpretación y el trazado de tres senderos peatonales -Sendero de la Laguna, Sendero del Bosque y Sendero del Médano- permiten a los visitantes la contemplación y comprensión de los ambientes naturales comprendidos por el parque. En el predio puede conocerse el casco de la antigua Estancia San Huberto, El Castillo, declarado Monumento Histórico Nacional, así como otros interesante atractivos entre los que destacan el Tanque del Millón (reservorio de agua), la Ermita de la Virgen de Luján (punto panorámico), la Sala de Carruajes (colección de carruajes de época), las Caballerizas, y el Tambo. Una de las bellezas más características del lugar la constituye el avistaje de cervatillos junto a sus madres, y en tiempos de brama, los grandes machos con sus cornamentas.
Conocer la vida de campo desde la propia vivencia es una de las opciones más interesantes de Santa Rosa. En medio de un paisaje magnífico que descubre el amanecer y se oculta con el sol, muchos establecimientos rurales pampeanos ofrecen a los turistas la posibilidad de alojarse en sus cascos, saborear platos típicos, entrar en contacto con la peonada y participar de las labores diarias y las costumbres del lugar. Arreo de ganado, ordeñe de vacas, marcación y castración en la yerra, son algunas de las tareas en las que los visitantes desarrollan sus habilidades. Caminatas, cabalgatas, y participación en domas conociendo sus rituales básicos: encuentro de payadores, bailes folclóricos, guitarreadas; completan la oferta de este atractivo singular. Más allá del medio rural y la cordialidad que los unifica, cada establecimiento tiene su particularidad según la ubicación geográfica y la labor específica que realiza. Así, entre las Estancias de Santa Rosa se distinguen las siguientes con sus respectivas tareas:
Definida en parte como tierra de tradiciones, la ciudad de Santa Rosa aparece como un destino ideal para aquellos turistas decididos a encontrar espacios culturales e históricos. Este apacible itinerario, que permite comprender la idiosincrasia de los pampeanos, presenta como escalas básicas los lugares que se describen a continuación:
Las tierras de Guatraché fueron asiento de las tribus de Manuel Namuncurá, fundándose la ciudad en el año 1908, tras el éxito de una colonización privada. Allí se encuentra la extensa Laguna Guatraché, de 85 Km2 de superficie, ostentando sus aguas y fangos de propiedades curativas, y enmarcada por barrancos sobre los que se desarrolla un bosque xerófilo de caldenes, algarrobos y jarillas. Ideal para unas apacibles vacaciones disfrutando del Turismo Salud, el Complejo Termas de Guatraché se ubica dentro del balneario "Samuel Novick", en la laguna homónima, al sudeste de la provincia de La Pampa, ofreciendo su altísima concentración de sales a los bañistas. Centralizadas en dos piletas, una de las cuales yace cubierta para comodidad de los visitantes en temporada invernal, las aguas sulfatadas, cloruradas, cálcicas y magnésicas de este parque termal, son aconsejadas para pacientes con artrosis, artritis, lumbalgias y contracturas. Otros de los beneficios de este atractivo lo constituye su característico fango, propicio para tratar diversas afecciones de la piel, así como para cuestiones de estética y belleza. Contando en su predio con todos los servicios requeridos, restaurante y hotelería, Termas de Guatraché aparece como una visita obligada durante su estadía en la zona.
Allí, donde el microclima excepcional ha permitido la combinación de leyendas, religión y naturaleza, en el centro sur de la provincia de La Pampa, allí se alza el Parque Nacional Lihué Calel, protegiendo el sistema serrano homónimo, sus valores históricos, culturales y ambientales. Creado en el año 1977, y abarcando una superficie de 9.901 hectáreas que se pretendería ampliar hacia los salitrales del norte, este parque pertenece a la eco-región de monte de llanuras y mesetas, y resguarda respetuosamente a las llamadas sierras de la vida. Entre sus recursos naturales se destacan las serranías, cuya altura máxima alcanza los 600 m sobre el nivel del mar; el monte dominante con sus bosquecillos característicos de jarillas, chañar, piquilín, incienso y mata chilladora, y bosques de caldenes en los sectores más húmedos; las especies de flora que crecen en los roquedales; las múltiples especies animales entre las que vale mencionar vizcachas, cuises, guanacos, maras, zorros, hurones, pumas y lagartos colorados; así como una variada avifauna compuesta por martinetas, gallito copetón, halconcito gris y cardenal amarillo. Pero más allá de su deslumbrante riqueza de flora y fauna, el Parque Nacional Lihué Calel representa un substancial reservorio del pasado histórico de la región, centrándose sus atractivos culturales en el Cerro de la Sociedad Científica, punto más alto de la reserva, y el Valle de las Pinturas con su fascinante muestra del arte rupestre tardío, cuya antigüedad aproximada alcanzaría los dos mil años. Así de encantador y sorprendente resultará el Parque Nacional Lihué Calel para el visitante, quien podrá realizar en el predio actividades como trekking, mountain bike, escaladas, safaris fotográficos, recorrido por diferentes senderos, avistajes; o dejarse simplemente llevar por la energía disfrutando de las sierras de la vida con todos los sentidos. Posee lugares para acampar.