En la región de la pre-cordillera, la localidad de Huinganco es un tranquilo destino que atrapa con su sencillez y los paisajes que la naturaleza pintó sobre este rincón de la Provincia de Neuquén. Con diferentes alternativas para disfrutarla y conocerla, la pintoresca Cabaña de Artesanos es una de ellas: exhibiendo obras de arte realizadas por las manos de los lugareños, es un pedacito de la cultura local. Madera, cerámica, mimbre y lana son algunas de las materias primas con las que se crean estas artesanías.
Huinganco se destaca en el norte de la Provincia de Neuquén como una de las regiones dedicadas a la actividad forestal pero teniendo en cuenta el impacto ecológico que la misma produce. Muestra del compromiso de esta localidad es el Museo del Árbol y la Madera en dónde se pueden observar diferentes tipos de maderas clasificadas e identificadas. Se destaca además el rescate de Cipreses con más de 1200 años provenientes del Monumento Cañada Molina, en donde se pueden encontrar bosques con esta antigüedad.
Ascendiendo con la ayuda de un guía especializado, el Monumento Cañada Molina es un paseo ineludible para los visitantes del norte de la Provincia de Neuquén. Esta área protegida de 50 hectáreas se destaca por la presencia de su peculiar flora: en manchones sobre la zona cordillerana, aquí se encuentran los últimos cipreses nativos que resistieron la tala indiscriminada de la región. Son una reliquia natural ya que según estudios realizados alcanzan los 1200 años de antigüedad.
Al norte de Andacollo, siguiendo la Ruta Provincial Nº 39, se arriba a Colo Michico. Este lugar evoca el pasado de una forma emocionante, a través de 600 rocas estampadas con petroglifos. Los dibujos que presentan son muy variados: formas geométricas, humanoides y zoológicas; flechas; líneas y signos pero todos remiten a la época prehistórica.