Privilegiado su territorio con una exquisita diversidad natural, la provincia de Buenos Aires exhibe sus costas marítimas, ríos, arroyos y lagunas haciendo de la pesca una actividad prometedora y multifacética. Especies y modalidades para todas las preferencias, los aficionados encuentran aquí la satisfacción de una jornada completa, sea cual sea el lugar de su elección.
Entre sierras, bosques y sumidos en una mágica serenidad, dos espacios diferenciados entre sí hacen de la localidad de Balcarce un destino de pescadores. Por un lado la natural Laguna Brava, con su extensión propicia para la captura de buenos ejemplares; y por otro el Coto de Pesca Puerta del Abra, un criadero de truchas que funciona bajo la modalidad del pesque y pague. Por su parte, las lagunas cercanas a Olavarría son ambiente propicio para la pesca de excelentes ejemplares de pejerrey, al igual que los cursos de agua de General Madariaga, ciudad escenario en el mes de mayo del importante Concurso de Pesca El Pejerrey de Oro.
Si existe un espacio superador para la pesca deportiva, lo es la inmensa Laguna de Lobos. Pejerreyes, tarariras, dentudos, carpas, bogas, mojarras y bagres integran su fauna ictícola tentando a los pescadores a la captura valiéndose de la modalidad costa o embarcado. También la Laguna de Chascomús, con sus 3044 hectáreas, sus playas tranquilas y sus escarpados barrancos, es sitio propicio para hallar el tesoro acuático.
Lagunas como Los Quilmes, destinadas exclusivamente a la pesca, han posicionado a Trenque Lauquen en los primeros lugares de la provincia de Buenos Aires, e incluso del país, por su cantidad y calidad de pejerreyes. Mientras el Partido de Nueve de Julio, plagado de lagunas internas, se suma a su éxito, y la Laguna de Bragado se extiende en una superficie de 350 hectáreas ganando puntos entre los sitios más propicios para la pesca deportiva desde costa y embarcada.
Pero la verdadera satisfacción, los pescadores aficionados la conocerán en los ríos y arroyos del Delta del Tigre, donde peces como bogas, dorados, surubíes, armados, bagres, amarillos, pacúes, patíes, tarariras y carpas hacen al deleite deportivo de todo aquel que se asoma con su anzuelo y algún que otro señuelo.
San Pedro también es un destino muy conveniente para la temporada estival, ya que es entonces cuando se logran capturas de ejemplares en tamaños importantes. Pesca de tarariras y variada, con mosca, spinning y trolling, es una de sus ofertas más prometedoras.
Ramallo, Baradero, Escobar, San Fernando, Campana y San Nicolás completan la cartelera pesquera del Delta del Paraná, donde durante todo el año, aunque principalmente en las estaciones cálidas, el pique es bueno, los tamaños importantes, y las capturas satisfactorias.